La mesoterapia es una antigua técnica de medicina alternativa cuyo nombre proviene de la capa de la piel en la que se inyectan las sustancias, derivada del mesodermo embrionario. Fue inventada en 1952 por el médico francés Michel Pistor, que consiste en tratar las zonas afectadas con microinyecciones de medicamentos, homeopatía, vitaminas, minerales o aminoácidos.
No obstante, y aunque en 1987 la Academia Francesa de Medicina reconoció la mesoterapia como parte de la medicina convencional, las autoridades sanitarias han expresado su preocupación por la carencia de pruebas científicas controladas que avalen el empleo de esas técnicas.
La mesoterapia se utiliza para el tratamiento del dolor, agudo y crónico y tiene amplio campo de acción en la medicina deportiva, pues muchos fisioterapeutas se valen de estas técnicas para calmar el dolor producido por lesiones deportivas. Se le atribuyen también aplicaciones en el campo de la medicina estética como tratamiento para reducir la celulitis, adiposidades localizadas y arrugas, con el nombre de mesolifting.
«La mesoterapia puede utilizarse como tratamiento estético en diferentes procedimientos de eliminación de cicatrices, acné, psoriasis, vitíligo, pecas, flacidez, estrías, pérdida del cabello, alteración metabólica de la grasa, grasa localizada, enfermedades del sistema vascular periférico y úlcera de pierna.»
Fisioterapeuta experto en Clínica Plussana
Dichos pasos médicos no requieren hospitalización ni anestesia, pues se trata de un tratamiento con dolor, pero soportable mediante el cual se aplican entre 7 y 12 sesiones de 10 a 30 minutos, según la zona, durante 2 a 3 semanas. Los efectos son permanentes.
Los expertos indican que durante el tratamiento el paciente debe beber abundante agua para eliminar las toxinas y evitar la ingesta de alcohol además de la exposición al sol de la zona tratada.
Principalmente existen tres tipos de tratamientos de mesoterapia: facial, corporal y capilar, todos basados en microinyecciones, aunque también existe la mesoterapia no invasiva que utiliza otros sistemas como son los parches.
La mesoterapia, un tratamiento con muchas áreas de acción
A efectos físicos y estéticos, la mesoterapia es un tratamiento de la medicina alternativa que se emplea con el objetivo de eliminar la celulitis y los depósitos de grasa acumulada en zonas específicas del cuerpo.
Para ello se realizan una serie de microinfiltraciones alrededor de la zona en la que se encuentre la grasa acumulada, mediante el uso de una pequeña aguja especial para este tratamiento. La aguja trabaja en la primera capa de la dermis, justo debajo de la epidermis, que ha de haberse limpiado y desinfectado previamente con alcohol.
Con ella, se inyectan varias sustancias que intentan disolver la grasa, de forma que el cuerpo las elimine posteriormente a través de la orina. Ello hace que disminuya el volumen de esa zona concreta, ya que los productos homeopáticos o de medicina convencional que se emplean en las inyecciones actúan en el tejido adiposo. Ello libera el exceso de grasa y otras toxinas del organismo.
Pero se destaca siempre que la mesoterapia no es un método de adelgazamiento, aunque sí promueve la pérdida de peso como consecuencia de la eliminación de la grasa. No obstante, este es un tratamiento complementario a la dieta y al ejercicio físico, y que solo elimina la grasa localizada o celulitis que no es posible desaparecer mediante otros métodos.
Las partes del cuerpo que más tienden a acumular grasa localizada, y que por tanto se tratan más con la técnica de la mesoterapia, son el abdomen, los muslos, los glúteos y la papada, pero también en otras zonas como los tobillos y los brazos. Para potenciar el efecto del tratamiento se pueden utilizar lo que se conoce como cócteles, y que constituyen una síntesis de diversos compuestos vegetales con características liporreductoras, reafirmantes y moldeadoras.
Asimismo trata otras afecciones y problemas relacionados con el ámbito estético, arrugas de la piel, las cicatrices, el acné, las estrías o la pérdida de cabello.
Soluciones estéticas y alivio del dolor
Las sesiones de mesoterapia no producen resultados de forma inmediata. De hecho, se requieren varias sesiones continuas para que empiecen a notarse los cambios en los lugares tratados.
Como ya explicábamos, mientras se realiza el tratamiento, es necesario seguir una dieta, porque si se aumenta el consumo de productos grasos respecto al consumo habitual la técnica tampoco veremos resultados factibles. Además, es muy importante procurar beber agua de forma abundante para que la eliminación de esa grasa y las toxinas se realice mejor.
También se recomienda hacer cualquier tipo de ejercicio físico durante los días que se sometan a sesiones de mesoterapia, para que las grasas acumuladas en el organismo se movilicen después de las inyecciones también puede resultar adecuado dar un masaje drenante, con fin de movilizar la grasa y hacer que se disuelva más rápidamente.
Debemos destacar también que, a pesar de funcionar mediante agujas, la mesoterapia no es un procedimiento invasivo, pues no requiere ningún corte o incisión, por lo que los riesgos disminuyen en comparación con otros tratamientos de eliminación de grasa distintos. Además, no hace falta aplicar anestesia, y los tiempos de recuperación son más cortos.
Las sesiones son prácticamente indoloras y focalizadas únicamente en el lugar concreto en que se desee.
Vale indicar que puede hacerse en todas las partes del cuerpo excepto en las mamas.

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